jueves, 8 de mayo de 2014

XV-021 Nuestro Dios es Todopoderoso, Eterno y Misericordioso



NUESTRO DIOS ES TODOPODEROSO, ETERNO Y MISERICORDIOSO.

Una de las primeras cosas que nos enseña el Catecismo es aprender a definir a Dios, lo cual no es tarea fácil porque su magnificencia lo hace casi indefinible. No se puede encerrar en cuatro palabras algo tan grande y majestuoso, sin embargo, el hombre ha buscado siempre a Dios y ha tratado de definirlo en el sentido de identificarlo para poder encontrarlo y en la medida en que va detectando una a una sus características lo busca con mayor ansiedad. En el título de nuestra Meditación de hoy mencionamos solo tres de ellas, decimos que es Todopoderoso, que es Eterno y que es Misericordioso, ¿cuál es el significado de estas características?

Volviendo a nuestro texto inicial, el Catecismo, nos da una primera definición de Dios cuando nos dice que: “Dios es nuestro Padre, está en los Cielos, es Creador y Señor de todas las cosas. Es un Padre amoroso lleno de justicia, ternura y bondad.” Aún en su simplicidad, esta definición aclara muchas cosas al hombre que por miles de años buscó una explicación a su existencia y a su mundo, y que a pesar de todo todavía la sigue ignorando, demostrando con ello su escasa capacidad mental para comprender algo tan maravilloso.

Seguramente que una de las primeras cosas que el hombre se preguntaba era ¿quién había hecho todo aquello que le rodeaba? , el hombre se encontró viviendo en un mundo que tenía aire, plantas, árboles, animales, aguas y tantas otras cosas que le hacían posible la vida y que a la vez existía como una especie de mano invisible que lo cuidaba y le advertía de los peligros, es decir las dos primeras características de la definición, la de ser Creador y la de ser un Padre y comenzó la búsqueda, creyó que era el sol, creyó que eran algunos objetos de la tierra, creyó que eran seres mitológicos y que había muchos dioses, hasta el momento en que Dios decidió hablar al hombre por medio de los profetas y revelarse a si mismo por medio de su hijo Jesucristo.

Jesús nos revela a su Padre que es también Padre de todos nosotros, que es el Creador de todas las cosas y que es único, solo existe un Dios que se ocupa de todos los hombres, de los buenos y de los malos, de los blancos y los negros, de los pobres y los ricos, que envía su lluvia y hace salir el sol sobre todos, que todo lo puede, “Porque para Dios nada es imposible” ( Lc 1, 37), que es eterno pues la muerte no tiene poder sobre él, como quedó demostrado con la resurrección de Jesucristo al tercer día de su muerte en la Cruz del Calvario, y que finalmente es también justo y misericordioso porque es capaz de perdonar nuestras faltas, aún los pecados más grandes, si le pedimos perdón y nos acogemos a su infinita misericordia.
Glorifiquemos a Dios con nuestra vida.

Gustavo Carías.

Que la paz de Cristo reine en tu corazón, te deseo un feliz fin de semana y no olvides el rezo del Rosario en Familia y la asistencia a la Misa Dominical, que Dios te bendiga.

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