jueves, 20 de diciembre de 2012

XIII-118 Ya se van disipando las tinieblas y brilla la luz verdadera




YA SE VAN DISIPANDO LAS TINIEBLAS Y BRILLA LA LUZ VERDADERA.

Para concluir nuestras meditaciones del Décimo Tercer Año, hemos escogido este título tomado de la Primera Carta del Apóstol San Juan, (1 Jn 2, 8) que simboliza la venida de Jesucristo a la tierra. Nos preparamos en este tiempo de Adviento para celebrar el Nacimiento de Jesús y sabemos que eso tiene como fin disipar las tinieblas del pecado y hacer brillar la luz verdadera que es el camino la verdad y la vida.

También se acerca el fin del año 2012, que como siempre es tiempo de resumir, de hacer inventario de nuestras vivencias y de nuestros logros durante los doce meses que están por finalizar. En nuestro caso hemos logrado alcanzar la Meditación No. 118, al igual que lo hicimos en los dos años anteriores, lo que equivale aproximadamente a una meditación por cada tres días del año y hemos tratado los más diversos temas relacionados con nuestra religión, hemos hablado de la Vida de Cristo, del Amor que debemos al Padre, de los Santos, de los Temas de Actualidad en materia religiosa, hemos hablado de Betania, de las Apariciones de la Virgen Santísima en diversas partes del mundo, de la Vida de la Sierva de Dios Maria Esperanza y de su causa de beatificación, de la Fundación Betania y de la Coral Betania, en fin hemos abarcado un amplio abanico de Temas que dan para pensar y reflexionar sobre cada uno de ellos, hemos recibido más de 155.000 visitas en nuestra página web, siempre con el objetivo de ayudarles a crecer espiritualmente, a ejercitar el espíritu, a fortalecerlo y alejarnos aunque sea por unos minutos del mundo y de sus trampas y engaños, siempre debemos tener presente que no somos de este mundo, estamos aquí solo de tránsito, nuestra verdadera meta es el Reino de los Cielos que nos vino a anunciar Cristo.

Para otros, los más pesimistas, se acerca el fin del mundo, recuerdo que a la Sierva de Dios Maria Esperanza le hizo esa pregunta en una oportunidad el periodista norteamericano Michael Brown, y ella con una sonrisa le respondió “Tenemos que tener los pies sobre la tierra y no  estar pensando tanto en las cosas que están ocurriendo y en las que van a suceder, eso es perder el tiempo, debemos pensar en nuestra vida espiritual…Dios quiere que todos nos salvemos, por eso nos da oportunidades para que el hombre por sí mismo se fortalezca y vea la luz”. Se trata de esa luz precisamente, la luz que disipa las tinieblas, la que ahora se acerca a nosotros en esta Navidad, vamos a recibirla con todo el amor que seamos capaces de dar y vamos a cumplir la voluntad del Padre amándonos los unos a los otros.

Les deseo a todos de corazón una Feliz Navidad y un Próspero Año Nuevo 2013, que finalicemos el año llenos de entusiasmo por lo que hemos logrado y llenos de esperanza en el porvenir, sabiendo que Dios está siempre a nuestro lado que no nos abandona y que asidos a su mano podemos avanzar con plena confianza hacia el nuevo amanecer de Jesús.

Que la paz de Cristo reine en tu corazón y la bendición Dios Todopoderoso descienda sobre ti y toda tu familia y les acompañe siempre, nos veremos el próximo año, si Dios quiere.

martes, 18 de diciembre de 2012

XIII-117 En la tierra Paz a los Hombres.





EN LA TIERRA PAZ A LOS HOMBRES.

Recordemos el cántico de los ángeles al anunciar a los pastores el nacimiento del Niño Jesús: “Gloria a Dios en el Cielo y en la tierra paz a los hombres que ama el Señor” (Lc 2, 14). Es la voluntad del Padre que el hombre viva en paz y más aún en un momento de Gloria como es aquel que recordamos en estos días, así hemos oído muchos episodios aún en las guerras más terribles en los que el día de la natividad del Señor se hace una tregua y se presentan casos de humanidad y de hermandad entre los hombres, cumpliendo la voluntad de Dios.

Nosotros debemos prepararnos espiritualmente para la llegada del Señor, ya lo hemos estado haciendo en forma material, adornando nuestra casa, construyendo el pesebre, comprando los regalos y preparando las comidas para la cena de Nochebuena, pero también tenemos que hacerlo espiritualmente, y para lograrlo es necesaria la paz, la paz de nuestros corazones y me dirán ¿pero cómo puedo lograrlo en medio de tantas tareas y ocupaciones? ¿Cómo puedo tener paz si no me alcanza el presupuesto para todo lo que tenemos que hacer?
La respuesta nos la da el Beato Papa Juan XXIII, el Papa Bueno, como cariñosamente lo conocemos, él tuvo un plan que lo hizo programa de su vida: 1º. La obediencia, o vivir según el imperio de otro; 2º. La pobreza, o tener lo menos no poniendo en ello el corazón; 3º. La humildad o juzgarse el último en todo; y 4º. Hacer la voluntad de Dios.

Hablemos primero de la obediencia, todos tenemos a alguien que está por encima de nosotros, en la familia: nuestra madre, nuestro padre, un tío, una persona mayor; en los trabajos: el jefe, el supervisor, el director; en el colegio: la maestra, el profesor, el director. Si nosotros nos mostramos rebeldes ante las instrucciones que ellos nos dan, estamos perturbando la paz, ellos se van a sentir incomodos con alguien que no obedece y nosotros vamos a estar tensos sabiendo que no estamos haciendo lo que se nos ha mandado a hacer y cuando somos cabeza de familia o jefes o directores tenemos por sobre nosotros los mandamientos de Dios, por eso debemos pedirle a Dios, por medio de la oración,  que esté siempre cerca de nosotros para evitar los malos pensamientos y los temores que nos llenan de aflicción perturbando la paz de nuestro espíritu.

Sigamos con la pobreza, “Bienaventurados los pobres de corazón, porque de ellos es el Reino de los Cielos”, ninguna cosa material es capaz de saciar en forma permanente las necesidades de nuestro espíritu, ningún regalo es capaz de consolarnos, solo Dios es capaz de hacerlo y sin él todo lo demás es frivolidad.

Por último, seamos humildes, no significa esto vestirnos de harapos, significa sentirnos los últimos en todo, somos solo tierra inánime y vacía hasta que la luz de Dios nos alumbra y su soplo nos da vida. Hagamos la voluntad de Dios y él concederá la paz a nuestras almas, esa paz que necesitamos para esperar su llegada. Glorifiquemos a Dios con nuestras vidas.


Que la paz de Cristo reine en tu corazón y la bendición de Dios Todopoderoso descienda sobre ti y toda tu familia y permanezca siempre.

viernes, 14 de diciembre de 2012

XIII-116 La Virgen de Guadalupe 3a. Parte


LA VIRGEN DE GUADALUPE 3ª. Parte.

Antes de entrar en materia quería agradecer a todos los lectores que cariñosamente me enviaron sus felicitaciones por mi cumpleaños el pasado miércoles 12 de Diciembre, Día de la Virgen de Guadalupe, que ella con su infinita ternura les premie su bondad derramando sobre ustedes las gracias de las cuales está plena, como lo dijera el ángel Gabriel.

Vamos ahora a concluir nuestras meditaciones sobre la Aparición de la Virgen de Guadalupe que está por cierto muy ligada a la época del Adviento que estamos viviendo, ya que ella está en cinta, está esperando un niño, como lo demuestra la cinta negra que lleva atada a su cintura ya que esta era una costumbre indígena de aquellos tiempos que la mujer embarazada usara este atuendo para conocimiento y respeto por parte de las otras personas, de allí precisamente deriva la expresión “estar en cinta”.

En nuestra narración de los hechos habíamos quedado en que el indio Juan Diego, preocupado por la gravedad de su tío, intentó evadir un encuentro con la Virgen para no retrasarse en la diligencia que iba a hacer, pero ella se le apareció en el camino y lo interrogó sobre lo que pasaba y le dijo que no se preocupara porque su tío no moriría y que en ese mismo momento había quedado libre de su enfermedad y lo invitó a que subiera a la colina y cortara algunas rosas para ella, así lo hizo el indiecito y encontró con sorpresa que a pesar de que era invierno, la colina estaba llena de flores frescas y perfumadas, las cortó y las llevó a la Señora quien las tomó en sus manos y las colocó de nuevo en su manto o tilma que es el típico vestido de los indios del lugar, diciéndole que esa era la prueba que debía llevar al obispo para que pudiera creer en las palabras del indio y procediera a edificar el templo que la Virgen había pedido.

El indio fue de nuevo a ver al obispo y cuando éste lo recibió le dijo que traía la prueba que había pedido y abriendo su tilma mostró las rosas que había cortado en invierno, lo que ya de por si era un signo, pero los presentes vieron con asombro como en la tela donde había portado las rosas se había dibujado perfectamente la imagen de la Virgen Santísima y cayeron de rodillas con lágrimas en los ojos.

De inmediato el obispo se dispuso a construir una pequeña capilla en el Monte Tepeyac a donde fue llevada la imagen y Juan Diego vivió algunos años en una casita cerca del lugar, donde atendía a los peregrinos y les contaba lo sucedido.

El nombre de Guadalupe le fue dado por el obispo Zumárraga quien era devoto de la Virgen del mismo nombre que se venera en España, dado que la Virgen había dicho a Juan Diego su nombre en el idioma indígena con una palabra muy parecida pero muy difícil de pronunciar.
Las conversiones al catolicismo aumentaron de manera impresionante como consecuencia de aquellas apariciones y se cuentan por millones las personas que de todas partes de Méjico y de América Latina visitan anualmente el Santuario para ver la pintura de la Virgen que ha sido objeto de innumerables estudios que cada vez descubren maravillas sorprendentes respecto a su contenido lo que hizo que el Papa Pio XII expresara un día: “En la tilma de Juan Diego, pinceles que no pertenecen a este mundo pintaron una imagen dulcísima”. Hay una gran simbología en aquella pintura, no solo lo que ya mencioné sobre la cinta sino que el rostro de la virgen es de color mestizo, es decir ni indio ni blanco sino intermedio para mostrar la raza que se crearía con la mezcla de las dos civilizaciones que se habían enfrentado y ahora se reconciliarían y ella está vestida con los colores que solo usaban los emperadores aztecas como para revelarse como Madre y Reina del Universo.

El 24 de agosto de 1910 el Papa Pio X proclamó a la Virgen de Guadalupe “Celestial Patrona de toda América Latina” y la actual basílica que existe en el lugar tiene una capacidad para 10.000 fieles, inaugurada en octubre de 1976 y visitada por el Papa Juan Pablo II dos años después.

Veneremos pues a nuestra patrona con todo fervor y tengamos fe en su amor para con nosotros. “Ave María, Madre de Cristo y de la Iglesia. Ave, vida, dulzura y esperanza nuestra. A tus cuidados encomiendo las necesidades de todas las familias, las alegrías de los niños, los proyectos de los jóvenes, las preocupaciones de los adultos, el dolor de los enfermos y la serena madurez de los ancianos.”

Glorifiquemos a Dios con nuestras vidas.

Que la paz de Cristo reine en tu corazón, te deseo un feliz fin de semana y no olvides el rezo del rosario en familia y la asistencia a la misa dominical, que Dios te bendiga.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

XIII-115 La Virgen de Guadalupe



LA VIRGEN DE GUADALUPE.

Hoy celebra la Iglesia el Día de la Virgen de Guadalupe, Patrona de México y de América Latina, es un gran día y a la vez muy singular por la coincidencia entre los números del día, el mes y el año, hecho que solo puede darse matemáticamente doce veces en cada siglo y que de nuevo ocurrirá dentro de 89 años, diez años más de los que he vivido hasta hoy.

La Aparición de la Virgen de Guadalupe ocurre en los comienzos de la colonización de las tierras mejicanas por el imperio Español, recordemos que 27 años después del Descubrimiento de América, en 1519, Hernán Cortés desembarcó en las costas de Méjico con apenas 600 hombres, una veintena de caballos y algunas piezas de artillería, lo cual fue suficiente para arrasar con l a capital de los aztecas, la ciudad de Tecnochtitlan, “la ciudad del sol” edificada sobre una isla del lago Texcoco. Sin embargo, hubo también circunstancias internas que facilitaron esta conquista de los españoles, los aztecas que formaron un gran imperio tenían sus propias creencias religiosas, pero poco tiempo antes de la conquista, la hermana del emperador Monctezuma había soñado que vendrían muchas naves de un país lejano con velas blancas en las cuales había cruces negras que traerían a los aztecas la verdadera religión, cuando el Emperador fue informado de las características de los invasores que coincidían con el sueño de su hermana, pensó que venían en son de paz y les abrió las puertas de la ciudad.

La Conquista fue sangrienta, solo en la noche negra de la invasión cerca de cien mil indígenas perdieron la vida y posteriormente los indios fueron diezmados y sometidos por los españoles a una esclavitud y crueldades inauditas, al punto de que el pueblo azteca prefería la muerte a estar sometido a los invasores, “déjennos pues morir, déjennos perecer, porque nuestros dioses han muerto”, incluso las jerarquías católicas llegadas a Méjico fueron crueles con los indígenas, el primer Obispo Juan de Zumárraga, franciscano, a pesar de ser un hombre abierto y generoso, estaba orgulloso de haber derribado 500 templos aztecas y 20.000 ídolos, los indios llegaron hasta el extremo de no querer procrear hijos para que no vivieran el horror que ellos estaban viviendo.

En medio de esta terrible oposición entre las dos razas que se habían encontrado y apenas a diez años de la destrucción de Tenochtitlan, ocurren las apariciones de la Virgen de Guadalupe que van a dar lugar a un cambio importante y al inicio de la conciliación entre vencedores y vencidos.

En el año 1531 la Virgen se aparece a un indiecito llamado Juan Diego en medio del canto armonioso de los pájaros y de una música celestial para decirle que ella es la Virgen Maria Santísima y quiere que en el lugar de la aparición se construya un templo en su honor.
Continuaremos hablando sobre este tema en la próxima Meditación. Glorifiquen a Dios con sus vidas.

Que la paz de Cristo reine en tu corazón y la bendición de Dios Todopoderoso descienda sobre ti y toda tu familia y permanezca siempre.

XIII-114 La Virgen de Guadalupe



LA VIRGEN DE GUADALUPE.

Hoy celebra la Iglesia el Día de la Virgen de Guadalupe, Patrona de México y de América Latina, es un gran día y a la vez muy singular por la coincidencia entre los números del día, el mes y el año, hecho que solo puede darse matemáticamente doce veces en cada siglo y que de nuevo ocurrirá dentro de 89 años, diez años más de los que he vivido hasta hoy.

La Aparición de la Virgen de Guadalupe ocurre en los comienzos de la colonización de las tierras mejicanas por el imperio Español, recordemos que 27 años después del Descubrimiento de América, en 1519, Hernán Cortés desembarcó en las costas de Méjico con apenas 600 hombres, una veintena de caballos y algunas piezas de artillería, lo cual fue suficiente para arrasar con l a capital de los aztecas, la ciudad de Tecnochtitlan, “la ciudad del sol” edificada sobre una isla del lago Texcoco. Sin embargo, hubo también circunstancias internas que facilitaron esta conquista de los españoles, los aztecas que formaron un gran imperio tenían sus propias creencias religiosas, pero poco tiempo antes de la conquista, la hermana del emperador Monctezuma había soñado que vendrían muchas naves de un país lejano con velas blancas en las cuales había cruces negras que traerían a los aztecas la verdadera religión, cuando el Emperador fue informado de las características de los invasores que coincidían con el sueño de su hermana, pensó que venían en son de paz y les abrió las puertas de la ciudad.

La Conquista fue sangrienta, solo en la noche negra de la invasión cerca de cien mil indígenas perdieron la vida y posteriormente los indios fueron diezmados y sometidos por los españoles a una esclavitud y crueldades inauditas, al punto de que el pueblo azteca prefería la muerte a estar sometido a los invasores, “déjennos pues morir, déjennos perecer, porque nuestros dioses han muerto”, incluso las jerarquías católicas llegadas a Méjico fueron crueles con los indígenas, el primer Obispo Juan de Zumárraga, franciscano, a pesar de ser un hombre abierto y generoso, estaba orgulloso de haber derribado 500 templos aztecas y 20.000 ídolos, los indios llegaron hasta el extremo de no querer procrear hijos para que no vivieran el horror que ellos estaban viviendo.

En medio de esta terrible oposición entre las dos razas que se habían encontrado y apenas a diez años de la destrucción de Tenochtitlan, ocurren las apariciones de la Virgen de Guadalupe que van a dar lugar a un cambio importante y al inicio de la conciliación entre vencedores y vencidos.

En el año 1531 la Virgen se aparece a un indiecito llamado Juan Diego en medio del canto armonioso de los pájaros y de una música celestial para decirle que ella es la Virgen Marìa Santísima y quiere que en el lugar de la aparición se construya un templo en su honor.

Continuaremos hablando sobre este tema en la próxima Meditación. Glorifiquen a Dios con sus vidas.


Que la paz de Cristo reine en tu corazón y la bendición de Dios Todopoderoso descienda sobre ti y toda tu familia y permanezca siempre.

viernes, 7 de diciembre de 2012

XIII-113 Como debe ser el Pesebre o Nacimiento


COMO DEBE SER EL PESEBRE O NACIMIENTO.

En estos días se ha levantado una polvareda de comentarios acerca de “Como debe ser el Pesebre o Nacimiento”,  a raíz de unas palabras del Papa en las que comentó que las figuras de la mula y el buey no eran imprescindibles en la representación del Nacimiento de Jesús. Si a ver vamos el Papa tiene razón, porque se trata de representar un hecho ocurrido hace más de dos mil años y de cuya forma solo nos quedan algunas frases que leemos en los evangelios y en libros escritos por algunos videntes en épocas más recientes.

La representación del nacimiento de Jesús es una obra mudable que se presta muchísimo para la imaginación y la creatividad del que la haga, hemos visto y contemplado pinturas y pesebres con figuras en miles de formas y tamaños, cada uno reflejando la idea de su autor y sus posibilidades, lo que realmente es imprescindible es que la representación nos diga ¿quién nació? Y ¿de quien nació? Para que pueda ser realmente un nacimiento, lo demás: el paisajismo, el musgo, los animales, la casita, las ovejas, los pastores, los ángeles, otras figuras y la iluminación son elementos adicionales que van a gusto del autor.
Un amigo me escribe y me dice que lo que pasa es que nos avergüenza pensar que nuestro rey nació en un ambiente de humildad y pobreza extrema que si lo comparamos con nuestro propio modo de vivir la diferencia nos señala con el dedo, pueda que tenga razón. Nos dice Lucas en el evangelio: “Mientras estaban en Belén, llegó para María el momento del parto y dio a luz a su hijo primogénito. Lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, pues no había lugar para ellos en la sala principal de la casa.” (Lc 2, 6-7) Muchos toman estas palabras al pie de la letra, mientras que otros no se encasillan en ellas y echan a volar su imaginación, porque si bien es cierto que el Niño nació en humildad y pobreza, tampoco era para vivir todo el tiempo envuelto solo en pañales, de hecho existen otras narraciones que nos hablan de la elaboración de vestiditos para el Niño por parte de Santa Ana, la Madre de María y es muy probable que la Virgen se haya llevado con ella algunos de ellos para su viaje a Belén.

También existe, por otra parte, una campaña para evitar el uso del musgo en los pesebres ya que su utilización y venta indiscriminada para estos usos decorativos ha hecho que disminuya su disponibilidad para otros usos mas importantes de estas plantas cuyo cultivo dura hasta diez años para lograrse, por lo que es materia de conservación ambiental el procurar su sustitución en los pesebres navideños por otros materiales como arena, papel,  piedra y aserrín, para representar el suelo.

Meditemos sobre este tema y hagamos nuestro pesebre sin pensar tanto en la parte decorativa sino más bien en lo que tiene de espiritual para nosotros que es el recordar el ejemplo de humildad y pobreza que Dios quiso darnos con este hecho tan trascendente que estamos celebrando y la luz que trajo consigo para alumbrar las tinieblas de este mundo. Glorifiquemos a Dios con nuestra vida.
 
Que la bendición de Dios Todopoderoso descienda sobre ti y toda tu familia y permanezca por siempre, te deseo un feliz fin de semana y no olvides el rezo del Rosario en Familia y la asistencia a la Misa Dominical.

Cosas de Fe - 001





Hola Amigos:

                               El próximo sábado 8 de Diciembre, Día de la Inmaculada Concepción, es el cumpleaños del Sr. Geo Bianchini, esposo de la Sierva de Dios María Esperanza de Bianchini y actual Presiente de la Fundación Betania, Asociación Civil adscrita a la Iglesia Católica, igualmente es el día aniversario de su matrimonio, hecho ocurrido el 8 de Diciembre de 1956 en la Capilla del Coro de la Inmaculada Concepción ubicada en  la Basílica de San Pedro en Roma con permiso especial de Su Santidad el Papa. Estos hechos se conmemorarán con una Santa Misa en la Catedral de Caracas a las 5pm. que contará con la actuación de la Coral Betania.

                               Me contaron por allí un hecho ocurrido en las Estados Unidos y que está siendo objeto de estudio, el cual les narro tal como me lo contaron, sin emitir juicio alguno sobre ello. Se trata de una pareja de jóvenes esposos ateos que tienen una niña a la que le descubrieron un cáncer en los ojos, muy rara enfermedad, lo cual ameritaba que debían extraer quirúrgicamente los ojos para tratar de detener la enfermedad de acuerdo con el diagnostico médico. La niña fue sometida a una primera operación en la que le extrajeron uno de los ojos y se programó para realizar una segunda operación en la que se haría lo mismo con el otro ojo. En el entretanto una persona de la Comunidad Betánica del lugar le entregó a la madre de la niña una estampita con la oración de la Sierva de Dios para que en medio de su situación desesperada, a pesar de su condición de atea, le pidiera su intercesión por la salud de la niña. La madre lo hizo y cuenta que se le apareció una señora vestida de blanco con pelo castaño que le indicó que no permitiera que a la niña le tocaran el otro ojo, así lo hizo y se negó a que se efectuara la segunda operación, posteriormente a esta situación la niña ha sanado totalmente y el cáncer ha desaparecido. Además, la Iglesia ganó un nuevo miembro pues la madre de la niña ha pedido ser bautizada y está estudiando el catecismo para ingresar a nuestra Iglesia. Alabado sea Dios.


Un abrazo y Feliz Navidad

Su amigo

miércoles, 5 de diciembre de 2012

XIII-112 ¿Por qué había que guardarlo?





¿Por qué HABÍA QUE GUARDARLO?

Ayer hablábamos de la forma meticulosa en que el Señor preparó todo para que la existencia del Dios humanado se mantuviera en secreto, para guardar y preservar aquel tesoro, y cabría hacerse la pregunta ante este misterio ¿Por qué había que guardarlo? Si para la humanidad representaría un enorme beneficio, si era un bien que Dios haría a los hombres al revelarse de forma nítida, al mostrarnos su misericordia infinita, al decirnos que no era como aquellos dioses terribles de la antigüedad, castigadores e inmisericordes, sino que era un Dios de bondad, de misericordia y de perdón que quería la paz y no la guerra, que quería el amor entre los hombres y no el odio, la respuesta nos la da Jesús con su vida, el secreto pudo mantenerse durante treinta años, pero al comenzar a revelarse apenas duró tres años.
Mi deseo es que ustedes aprovechen este tiempo del Adviento para crecer espiritualmente, esta espera por la venida de Jesús es una magnifica oportunidad para lograr este propósito, debemos “revestirnos de Cristo”, porque el Adviento es una llamada para que el cristiano se revista de Jesucristo. Cada día que pasa nos acerca más al día de la Natividad del Señor, crece nuestra ansiedad por la llegada de ese momento, de igual modo debe crecer nuestra vida espiritual y ello lo podremos lograr con la meditación, la oración, la penitencia y la eucaristía.

Jesús vino para enseñarnos que no debemos apegarnos a los bienes materiales que de la misma manera que vinimos al mundo, desnudos, desprovistos de todo, así partiremos, nada de lo material que nos rodea nos pertenece, todo es de Dios que nos lo facilita para que lo administremos y de la manera como lo hagamos nos juzgará al final de nuestra existencia, pero bien sabía El que este mensaje no habría de ser acogido por los ricos y poderosos ni por los sabios y apoltronados que el mensaje era para los pobres de espíritu, los que lloran, los mansos de corazón, los que tienen hambre y sed de justicia, por eso dice Jesús en su oración al Padre: “!Te doy gracias, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y a los entendidos y las has revelado a la gente sencilla! ¡Gracias, Padre, porque así te ha parecido bien!” (Lc 17, 24) Esa es la respuesta a la pregunta inicial.

Vivamos pues el Adviento, la espera del nacimiento de Jesús, no como algo del pasado, como un simple hecho histórico, sino con la misma ansiedad con que debe haberlo vivido María en los días anteriores al parto y pidamos al Señor que nos de esa gracia de poder esperarlo con ansiedad, con deseos de acercarnos a El y crezcamos en el espíritu en la medida que nos acercamos a ese día, revivamos ese pasado glorioso para hacer nuestra felicidad presente y construir nuestra felicidad futura. Glorifiquemos al Señor con nuestra vida.

Que la paz de Cristo reine en tu corazón y la bendición de Dios Todopoderoso descienda sobre ti y toda tu familia y permanezca siempre.

martes, 4 de diciembre de 2012

XIII-111 Como guardar un Tesoro



COMO GUARDAR UN TESORO.

En estos días del Adviento, o sea de la espera del Señor, centremos nuestras meditaciones en todo lo relativo a los preparativos que Dios hizo para su nacimiento, se trataba de guardar un tesoro, Dios quiso que su Hijo viniera a la tierra y se hiciese hombre para revelarse a la humanidad y al mismo tiempo procurar su salvación, pero en sus primeros pasos tenía que resguardarlo de la furia del demonio y del mundo, se trataba de su mayor tesoro y ¿cómo podría esconderlo mientras fuera frágil y débil? ¿A quienes podría confiarlo?

Ya desde mucho antes había escogido a María, la hija de Joaquín y Ana, aquella humilde niña de Nazaret para ser la que engendraría en su vientre al Hijo del Altísimo, pero faltaba por una parte su voluntaria aceptación, porque Dios no obliga a nadie a hacer su voluntad, es decir faltaba el “sí”  de María y además se requería de una ayuda y protección para tan importante tarea que solo mediante la formación de una familia podría lograrse, fue así que Dios en su inmensa sabiduría determinó que María debía casarse y formar un hogar que se completaría al nacer Jesús, la Sagrada Familia de Nazaret.

Cuando María cumplió los catorce años, el Señor hizo que se juntaran en Jerusalén, un grupo de varones descendientes de la tribu de Judá y del linaje de David, entre los cuales estaba José, procedente de Nazaret, quien era también descendiente de David y tenía treinta y tres años, bien dispuesto, de agradable rostro, de incomparable modestia y que desde los doce años había hecho voto de castidad, llevando una vida santa e irreprochable ante los ojos de Dios. El Sumo Sacerdote los reunió en el templo y poniéndose en oración con ellos pidió al Altísimo la inspiración de como escoger al elegido, fue así como decidió entregar a cada uno de los convidados una vara seca y que todos pidiesen con fe viva que la voluntad de Dios se manifestase para conocer quien entre ellos tendría la dicha de desposar a María. Habría que decir que todos se sentían merecedores de tan especial escogencia por sus méritos y virtudes, pero que solo José  se consideraba a si mismo indigno de tanto bien, resignándose de antemano a la santa voluntad del Altísimo. En medio de aquellas oraciones se vio florecer a la varita que tenía José en sus manos y una paloma descendió sobre su cabeza mientras Dios habló a su interior diciendo: “José, siervo mío, tu esposa será María, admítela con atención y reverencia, porque a mis ojos es aceptable, justa y purísima en alma y cuerpo y tú harás todo lo que ella te dijere”. Con estas señales del cielo los sacerdotes dieron a José por esposo elegido por Dios para la doncella María.

Meditemos sobre la belleza de las cosas de Dios y acerquémonos al pesebre pensando en todos estos misterios del Nacimiento de Jesús. Glorifiquemos al Señor con nuestra vida.
(Bibliografía: María de Jesús de Agreda, “Mística Ciudad de Dios, Vida de la Virgen María”.)

Que la paz de Cristo reine en tu corazón y la bendición de Dios Todopoderoso descienda sobre ti y toda tu familia y permanezca siempre.

lunes, 3 de diciembre de 2012

XIII-110 No puede haber fiesta sin el cumpleañero




NO PUEDE HABER FIESTA SIN EL CUMPLEAÑERO.

Ya estamos de vuelta, con nuevos bríos y mayor entusiasmo para celebrar las fiestas con motivo del Nacimiento del Niño Jesús. Como lo dice nuestro título de hoy, “No puede haber fiesta sin el cumpleañero”, en efecto debemos estar claros en lo que estamos haciendo, estamos celebrando el cumpleaños de Jesús, por eso están muy bien los decorados navideños, las roscas y el arbolito de pino silvestre, adornado con bolitas de colores y todas aquellas cosas que nos recuerdan la Navidad, todo eso está bien, pero no puede faltar la imagen del Niño Jesús, puesto que a él es a quien estamos celebrando, bien sea en un pesebre de miniatura o en una imagen sola, lo importante es que esté presente porque la fiesta es para él, cuando celebramos el cumpleaños de alguien están muy bien los adornos de la casa, los pasapalos y las bebidas, pero si no está presente el homenajeado aquello no es una fiesta, por eso no puede haber Navidad sin la presencia de Jesús.

Todo esto se los digo porque se ha observado en los años recientes una tendencia a dejar de lado el pesebre y la imagen del Niño Jesús, tildándolo de anticuado o pueblerino y no se si de manera intencional se nos atosiga de objetos y símbolos navideños que disocian la idea de su razón de ser, incluso se ha pretendido cambiarle a la Navidad el nombre y llamarla La Fiesta del Inicio del Invierno, menos mal que a nosotros en los países tropicales no nos pega mucho eso del inicio del invierno porque aquí llueve todo el año y la nieve solo la vemos en las cumbres andinas.

Es importante por tanto que nos preocupemos en primer lugar por tener en nuestra casa la representación de aquel momento inolvidable para la humanidad, como fue la primea venida al mundo de nuestro Dios y Señor Jesucristo, es decir un Nacimiento o un Pesebre, o al menos una imagen del Niño Jesús, imagen que debe haber sido previamente bendecida por un sacerdote, para que así podamos orarle y concentrar nuestra atención y nuestra meditación en el Niño Dios y tratar aquella imagencita con la reverencia que debemos a la presencia figurativa del Señor, no se trata de un objeto mas de adorno al lado del cual pasemos a cada momento indiferentes y presurosos, se trata de la representación de aquel Niño que con toda humildad para nuestro bien, nació en Belén para traer al mundo la Paz y el Amor.
Iniciamos desde ayer el tiempo de Adviento, es decir las cuatro semanas previas al nacimiento del Niño Jesús, es un tiempo de preparación para esta venida gloriosa, tiempo de meditación y de oración, tiempo de pensar en nuestros hermanos más necesitados y ayudarles compartiendo algo de lo nuestro con ellos, llevándoles así una palabra de aliento, una sonrisa, un pedacito del calor navideño que conforta nuestras casas. Glorifiquemos al Señor con nuestra vida.

Que la paz de Cristo reine en tu corazón y la bendición de Dios Todopoderoso descienda sobre ti y toda tu familia y les acompañe siempre.

jueves, 22 de noviembre de 2012

XIII-109 La Coherencia en nuestra vida



LA COHERENCIA EN NUESTRA VIDA.

Antes de entrar en materia, les participo que haremos un paréntesis en nuestras meditaciones a partir de hoy hasta los primeros días de Diciembre, motivado a que estaremos de viaje por el interior del país. Hoy celebramos el aniversario No.84 del nacimiento de la Sierva de Dios, María Esperanza, con motivo de lo cual la Fundación Betania invita para una Misa a las 6 y 30 pm. en la Iglesia Nuestra Señora del Carmen de Lomas de La Lagunita. Por su parte la Coral Betania ha dado a conocer su calendario de conciertos para esta navidad del 2012, el cual hemos comunicado a ustedes en la noche de ayer, contamos con su asistencia a los diferentes eventos. Y para finalizar esta introducción participamos el fallecimiento del Sr. Elio Guevara, padre de nuestra querida nuera Katiuska Guevara de Carías, hecho ocurrido el pasado sábado 17, celebrándose actualmente su novenario en la Iglesia de Santa Mónica, todos los días con Rosario a las 5 y 30 pm y Misa a las 6pm. Elevemos una oración para que el Señor tenga misericordia con él y le abra las puertas del Cielo.

Meditemos ahora sobre la Coherencia en nuestra vida. El término coherencia se refiere en primer término a la correspondencia que debe haber en los libros o textos bien formados, por la cual las ideas secundarias deben llevar a la idea principal, para encontrar el significado global del texto. Como una derivación de este significado original encontramos que en los seres humanos se opera esta coherencia entre el lenguaje, las emociones y el cuerpo, cuando estos tres dominios están íntimamente relacionados. Por una parte, el lenguaje es todo aquello que decimos, nuestros juicios, opiniones y declaraciones, en tanto que las emociones se refiere a todo lo que mueve nuestras acciones, a nuestro comportamiento y el cuerpo viene a ser el espacio físico en el que se manifiestan el lenguaje y las emociones.

Vamos a llevar toda esta teoría al plano práctico y a los ejemplos, una persona va a misa, reza, escucha la homilía y le dice a Dios que va a amar a sus hermanos en Cristo y a perdonarles sus faltas, pero al salir a la calle toma su carro y al primero que se le cruza por delante lo insulta y le dice de todo lo que se le ocurre, en esa persona no hay coherencia entre su lenguaje, sus oraciones, sus propósitos, su cuerpo y sus emociones, está actuando de modo contrario a lo que dice, no es coherente. Hay otra que dice yo soy amante de la paz y al primero que lo tropieza en la acera le busca pelea y lo reta, no es coherente, debemos ser coherentes en nuestras vidas, nuestro comportamiento, nuestras acciones y nuestro cuerpo deben ir de acuerdo a nuestro lenguaje y manifestar con hechos lo que manifestamos con nuestras palabras. Hay personas que publican frases muy bellas, citas de muy buenos filósofos, alabando el bien y repudiando el mal, y las repiten como si estuvieran plenamente de acuerdo con su contenido, pero a la hora de la verdad, a la hora de la prueba en su propio cuerpo fallan y se van por otro lado, en lugar de perdonar las ofensas se separan de sus amistades o de su familia, guardan rencores y resentimientos y de esa manera amargan su vida innecesariamente.

Gabriel Marcel, Filósofo católico, dramaturgo y crítico francés dijo: “Cuando uno no vive como piensa, acaba pensando como vive” En otras palabras que si no actuamos de acuerdo a lo que decimos y pensamos, vamos a terminar pensando todo lo contrario, cambiando lo bueno por lo malo, para evitar eso está la voluntad del ser humano, tenemos que ser fuertes y mantener nuestra coherencia sin dejarnos llevar por las circunstancias, ni por la ira ni por los resquemores, meditemos antes de actuar. Hagamos de Jesús el centro de nuestra vida y ayudemos al Señor a construir su Reino de Paz y Amor.

Gustavo Carías.

Que la paz de Cristo reine en tu corazón, feliz fin de semana que la pases bien y nos volvemos a ver en Diciembre, si Dios quiere.

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lunes, 19 de noviembre de 2012

XIII-108 Creo en Dios Padre



CREO EN DIOS PADRE.

Como todos los lunes vamos a continuar nuestro repaso del Catecismo de la Iglesia Católica, como lo aconseja el Santo Padre en este Año de la Fe, para lo cual hemos leído previamente los párrafos que van del 185 al 231, es decir el comienzo de lo que el Catecismo titula “Capitulo Primero, Creo en Dios Padre, Los símbolos de la Fe.”

Los símbolos de la Fe, también llamados “profesiones de fe” o “Credos” son fórmulas articuladas con las que la Iglesia, desde sus orígenes, ha expresado sintéticamnte la propia fe y la ha transmitido con un lenguaje común y normativo a todos los fieles. Desde los principios del cristianismo, los seguidores de Jesús comenzaron a usar “símbolos” para identificarse entre ellos mismos ya que como sabemos tenían que vivir perseguidos por los romanos y por los de su propia raza, los judíos, que querían extinguir esta nueva religión que había surgido y a la cual se le achacaban todos los males del imperio y de la sociedad, los que eran descubiertos eran encarcelados, maltratados para hacerles cambiar su modo de pensar y hasta condenados a muerte, lo que dio origen a los primeros mártires del cristianismo.

Los símbolos de la fe más antiguos son los bautismales. Puesto que el bautismo se administra “en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo” (Mt 28, 19) tal como lo mandó el propio Jesús haciendo referencia a las tres personas de la Santísima Trinidad. Luego tenemos los dos Credos que son el de los Apóstoles y el Niceo-Constantinopolitano, o como muchos popularmente los llaman el Credo Corto y el Credo Largo que surgieron en los primeros Concilios Ecuménicos de la Iglesia y se siguen usando hoy en día.

El Credo comienza por las palabras “Creo en Dios Padre, Todopoderoso, Creador del Cielo y de la Tierra” ¿Por qué? Porque es la verdad más importante de nuestra creencia y fuente de todas las demás verdades. Recordemos que en la época en que surge el cristianismo, tanto  los griegos como los romanos creían en muchos dioses, el Dios de la guerra, el Dios del Amor, etc., etc. Les hicieron estatuas representativas y entre ellas hicieron una para el Dios Desconocido, lo que le sirvió de base a Pablo en su predicación ante los griegos para decirles que precisamente él venía a hablarles de ese Dios que ellos desconocían y que era el Dios verdadero. Ese Dios es el mismo que los Judíos adoraban desde el Antiguo Testamento, el Dios de Abraham, el Dios de Jacob, el Dios de Moisés, pero que no se había revelado a otros pueblos sino hasta la venida de Nuestro Salvador. Jesús mismo lo ha confirmado: Dios “es el único Señor” (Mc 12, 29)

Para la próxima semana vamos a repasar los párrafos que van del 236 al 267 y los comentaremos el próximo lunes. Glorifiquen a Dios con sus vidas.


Que la paz de Cristo reine en tu corazón, y que tengas una feliz semana.

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miércoles, 14 de noviembre de 2012

XIII-107 Jesús, Buena Noticia de Dios


JESÚS, BUENA NOTICIA DE DIOS.

Se acerca la Navidad, fecha en que celebramos el Nacimiento de Jesús, ya se comienzan a escuchar los cantos navideños, los aguinaldos tradicionales, las criollísimas gaitas zulianas, el sábado tendremos el concierto navideño de la Coral Betania, el cual se llevará a efecto en el Anfiteatro de El Hatillo, población cercana a Caracas, a las 6pm, como un obsequio de este ya famoso grupo Coral, para todos los vecinos de Caracas y sus alrededores, se siente un particular ambiente festivo en las calles, en los centros comerciales y en los hogares.

La venida de Jesús como pequeño niño envuelto en pañales, nos hace de nuevo meditar en el significado que tiene para nuestras vidas y para toda la humanidad desde que ocurrió este hecho, hace mas de dos mil años, en una humilde población del Medio Oriente.

Dios lo había pensado desde muchos siglos antes, lo sabemos por las palabras de los profetas, estaba cubriendo todos los detalles, las cosas de Dios son perfectas y en esta ocasión se trataba nada mas y nada menos que de enviar a su Hijo a la tierra, que se despojara de toda su realeza y majestad y se abajara a la condición de un simple ser humano, ¿para qué? Ya el solo hecho de introducirse en un cuerpecito débil de un niño constituía un riesgo y una humillación sin precedentes, ¿qué buscaba Dios con todo esto? Pensemos, meditemos, Dios quería decirle algo a la humanidad.

Recordemos que la palabra Evangelio significa Buena Noticia, Jesús vino a traernos el Evangelio de Dios, es decir la Buena Noticia de Dios. Ya Dios estaba cansado de consentir a aquel pueblo ingrato que había escogido, el pueblo de Israel y decidió formar un nuevo pueblo, un pueblo que no estuviera basado en la raza o en la ubicación geográfica, que pudiera estar en todas las partes del mundo, ese pueblo se distinguiría de los demás por el bautismo, es decir un nacimiento en el espíritu, un nacimiento que podrían adquirir tanto los hombres viejos como los jóvenes y los recién nacidos, sin tener que volver al vientre de su madre.

Y fue así que decidió enviar a Jesús, para hacerlo todo de nuevo, para traernos la buena noticia de la decisión de Dios, la noticia de la salvación, y fue así como ungió al Mesías, a su propio Hijo, y lo envió a la tierra para hacer esta nueva alianza con los hombres, perdonarles sus pecados y darles como ley fundamental el amaos los unos a los otros, para que con su palabra abriera nuevos caminos de luz y de esperanza para toda  la humanidad. En Diciembre celebramos la llegada de esa Buena Noticia de Dios.

Esta buena noticia de Dios se fue propagando lentamente por el mundo conocido a costa muchas veces de sacrificios y de martirios y hace 500 años llegó al Nuevo Continente donde fue propagada por los misioneros, sin embargo todavía hay muchos entre nosotros que no la conocen, es nuestro deber divulgarla, porque Dios quiere que lo ayudemos a salvar el mundo y algunos quizás no reciban el evangelio sino a través de nosotros, de nuestro ejemplo y de nuestra caridad.

Que la paz de Cristo llene tu corazón y la bendición de Dios Todopoderoso descienda sobre ti y toda tu familia y permanezca siempre.

lunes, 12 de noviembre de 2012

XIII-106 La Respuesta del Hombre a Dios




LA RESPUESTA DEL HOMBRE A DIOS.

Continuando con nuestro repaso del Catecismo, como una manera de participar activamente en las recomendaciones el Papa sobre el Año de la Fe, recuerdo que les recomendé el pasado lunes la lectura de los párrafos del 142 al 184 para comentarlos hoy en nuestra meditación, esa porción del Catecismo está enmarcada en el Capítulo Tercero bajo el título de “La Respuesta del Hombre a Dios”.

Como habíamos visto anteriormente, dado que al hombre se le dificultaba mucho encontrar a Dios, el mismo Dios decide revelarse al hombre, al principio por medio de la palabra, luego por intermedio de los Patriarcas y de los Profetas y finalmente con el envío de su Hijo Unico, Jesús, completando así su revelación. En este capítulo del Catecismo se describe la manera como el hombre responde a esa revelación.

Dios por su gran amor invita al hombre a una comunión consigo y la respuesta adecuada de éste a esa invitación es la fe. La fe significa el sometimiento completo de su inteligencia y su voluntad a Dios, este sometimiento lo llama la Sagrada Escritura “obediencia de la fe”.
El primer modelo que nos presenta la Sagrada Escritura de este sometimiento libre a la palabra escuchada es Abraham, “el padre de los creyentes”, que como sabemos fue capaz de llevar a su hijo a un sacrificio que Dios le había ordenado y que lo detuvo en el último instante al comprobar la obediencia del gran patriarca. El Antiguo Testamento es rico en testimonios de esta fe y luego en el Nuevo Testamento se nos presenta a María como la manera más perfecta de obediencia de la fe, cuando da su asentimiento al anuncio del ángel para la maternidad de Jesús y luego durante toda su vida hasta el momento crucial de su sacrificio en la Cruz, en ningún momento su fe vaciló ni dejó de creer en el cumplimiento de la palabra de Dios.

Debemos distinguir entre la fe puesta en Dios y la fe puesta en una persona humana, ya que las Escrituras nos enseñan que en Dios debemos creer en forma absoluta y total, en tanto que poner nuestra fe en una persona humana es una actitud errada y vana.
La fe es un don gratuito de Dios que lo da a todo aquel que lo pide con humildad y es la virtud esencial para salvación del hombre. La fe supera la razón humana, pero no hay contradicción entre la fe y la ciencia ya que ambas provienen de Dios y San Agustín decía “Cree para comprender y comprende para creer”.

La fe debemos alimentarla con la escucha de la Palabra de Dios y con la oración, para que crezca y de frutos, actuando por medio de la caridad y dándonos la esperanza en las promesas del Señor.

Para la próxima semana vamos a repasar los párrafos del 185 al 231 y los comentaremos el próximo lunes. Glorifiquen a Dios con sus vidas.

Que la paz de Cristo reine en tu corazón y la bendición de Dios Todopoderoso descienda sobre ti y toda tu familia y permanezca por siempre.

jueves, 8 de noviembre de 2012

XIII-105 El que da la vida por sus amigos.



EL QUE DA LA VIDA POR SUS AMIGOS.

Dice Jesús: “Yo soy el Buen Pastor. El buen pastor da su vida por las ovejas. No así el asalariado, que no es el pastor ni las ovejas son suyas. Cuando ve venir el lobo, huye abandonando las ovejas, y el lobo las agarra y las dispersa. A él sólo le interesa su salario y no le importan nada las ovejas.” (Jn 10, 11-13) Más adelante en el mismo evangelio de Juan encontramos lo siguiente: “Este es mi mandamiento que se amen unos a otros como yo los he amado. No hay amor más grande que dar la vida por sus amigos, y son ustedes mis amigos si cumplen lo que les mando. Ya no les llamo servidores, porque un servidor no sabe lo que hace su patrón. Los llamo amigos, porque les he dado a conocer todo lo que aprendí de mi Padre. Ustedes no me eligieron a mi; he sido yo quien los eligió a ustedes y los preparé para que vayan y den fruto y ese fruto permanezca. Así es como el Padre les concederá todo lo que le pidan en mi nombre. Amense los unos a los otros; esto es lo que les mando.” (Jn 15, 12-17)
Efectivamente sabemos que Jesús dio realmente la vida por sus amigos que no fueron solamente los apóstoles sino también todos nosotros, fíjense que él define lo que quiere decir con la palabra amigos, son todos aquellos a quienes se nos han dado a conocer la revelación de la verdad,  los mandamientos del Padre; aquellos a los cuales El ha llamado por medio del bautismo y nos ha preparado con la Catequesis que recibimos antes de hacer la Primera Comunión, es decir todos nosotros los Católicos, los que formamos su Iglesia somos sus amigos.

Sin embargo, lo que es literalmente exacto en el caso de Jesús no podría serlo para nosotros pues es lógico que si todos diéramos la vida se acabaría la humanidad muriendo los unos por los otros, lo que Jesús quiere es que nos amemos los unos a los otros y amar significa cuidar al otro, agradarle, ayudarle, solidarizarse, compartir con él, perdonarle, desvivirnos por atenderles y servirles. Creo que la palabra moderna en castellano que mas se acerca al concepto es “devivirse” que significa: “mostrar incesante y vivo interés o solicitud por una persona o cosa” ejemplo: “cuando íbamos a casa se devivía porque no nos faltara nada”.
La Sierva de Dios Maria Esperanza decía que debíamos preocuparnos en primer lugar por los demás y en segundo término por nosotros mismos, ya que Dios conoce lo que nos hace falta y si confiamos en El sabemos que El se ocupará de solucionarnos nuestros problemas, mientras nosotros nos ocupamos de ayudar a los hermanos a las otras ovejas del rebaño a solucionar los suyos.

Practiquemos pues el amor más grande que es el de dar la vida por nuestros amigos, nuestros prójimos, nuestros semejantes, pero estemos claros que no se trata de poner el cuello en la guillotina por ellos, sino el desvivirnos porque se sientan bien y atenderlos en todo aquello que esté a nuestro alcance, preocuparnos de sus problemas tal como si fueran nuestros y ayudarlos a su solución, eso es amar y dar la vida por los amigos. Glorifiquen a Dios con sus vidas.

Que la paz de Cristo reine en tu corazón, te deseo un feliz fin de semana, no olvides el rezo del rosario en familia el día sábado y la asistencia a la misa dominical.