XXVI JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD 2011.
Ayer se dio comienzo en Madrid, España, a la XXVI Jornada Mundial de la Juventud 2011, que durará hasta el próximo domingo 21. Este es un evento organizado por la Iglesia Católica cada tres años para reunir a los jóvenes de todo el mundo como en una gran fiesta de la fe que trae abundantes frutos y gracias del Cielo a todos los participantes.
Para los jóvenes de muchos países se hace difícil obtener los recursos para poder costearse un viaje que los lleve a un acontecimiento de esta naturaleza, sin embargo el entusiasmo de la juventud les lleva a ingeniarse la forma de lograrlo, hemos sido testigos, aquí mismo en Venezuela de cómo grupos de jóvenes de escasos recursos han organizado desde hace tiempo rifas y otros medios lícitos para poder financiarse el viaje a España y ayer les veíamos presentes en la plaza de la Cibeles en Madrid, ondeando las banderas de sus países y coreando el nombre de Benedicto! Benedicto! A la espera de la llegada del Papa Benedicto XVI que será el día jueves 18.
Sin embargo, no todo es color de rosa, es doloroso ver como en un país como España que en un tiempo llegara a ser un bastión del catolicismo, de donde partieron muchos misioneros hacia América para evangelizar y también al Asia, donde algunos de ellos llegaron incluso a ser reconocidos como santos y mártires de la Iglesia, hoy en día se ve invadida por el securalismo y surgen grupos que protestan y se enfadan por la realización del evento y por la visita del Papa, atacándolo desde distintas trincheras y amenazando con boicotear las jornadas y da pena ver como los políticos españoles en su primerísimo deseo de conservar a sus votantes, vengan de donde vengan, dan declaraciones de imparcialidad ante la posición de los distintos sectores, a donde hemos llegado.
Su Santidad el Papa Benedicto XVI por su parte ha manifestado una gran esperanza en la realización de esta Jornada Mundial y ha escogido como lema de la misma una frase tomada de la carta de San Pablo a los Colosenses: “Arraigados y Edificados en Cristo, Firmes en la Fe” ( Col 2, 7 ). Presentando estas tres imágenes: el arraigo, la construcción y la firmeza en la fe, la primera que toma el simil de un árbol bien plantado con sus raíces que lo sostienen y que sin ellas sería llevado por el viento y moriría, y que en el caso de los jóvenes esas raíces serían los padres, la familia y la cultura de sus países, como decía el profeta Jeremías: “Bendito el que confía en el Señor y pone en el Señor su confianza, será un árbol plantado junto al agua, que junto a la corriente echa raíces, cuando llegue el estío no lo sentirá, su hoja estará verde, en año de sequía no se inquieta, no deja de dar fruto.” ( Jer 17, 7-8) La otra imagen es la de “Edificados en Cristo” es decir construidos sobre la roca firme que está bien fundada y tiene una estabilidad perdurable, para no caer en las propuestas fáciles y engañosas que se presentan a los jóvenes. Y finalmente, la firmeza en la fe, que es la que permitirá a los jóvenes resistir las fuertes corrientes laicistas del mundo actual que quiere apartar a Dios de la vida de las personas y de la sociedad, pretendiendo crear un “paraíso” sin El. Pero dice el Papa: “El mundo sin Dios es “un infierno”, donde prevalece el egoísmo, las divisiones en la familia, el odio entre las personas y los pueblos, la falta de amor, alegría y esperanza. En cambio, cuando las personas y los pueblos acogen la presencia de Dios, le adoran en verdad y escuchan su voz, se construye concretamente la civilización del amor, donde cada uno es respetado en su dignidad y crece la comunión con los frutos que esto conlleva.”
Que la paz de Cristo llene sus corazones y la bendición de Dios Todopoderoso llegue a todos sus hogares.
ORACION COMUNITARIA: Nos solicita Marlene Villegas, desde la Isla de Margarita, por sus hijos y nietos, y por ella misma, pidiendo la intercesión de la Sierva de Dios, María Esperanza, para el logro de su salud física y espiritual y para que su familia se mantenga unida y firmes en la Fe en Cristo, Nuestro Señor. (Recemos un Padre Nuestro, un Ave María y Gloria)
No hay comentarios:
Publicar un comentario